El Reiki es una terapia holística que se basa en la canalización de energía universal a través de la imposición de manos para promover la sanación física, mental, emocional y espiritual.

Durante una sesión de Reiki se canaliza la energía universal y a traves de la imposición de las manos en el cuerpo del paciente o enviada a distancia permite que la energía fluya y se equilibre constantemente. Este proceso ayuda a desbloquear los canales de energía, conocidos como chakras, y a restaurar el flujo armonioso de la energía vital, lo que facilita la auto-sanación del cuerpo y promueve un estado de equilibrio y bienestar.

Los beneficios del Reiki son diversos y abarcan diferentes áreas de la vida:

En el plano físico:  puede aliviar el dolor, reducir el estrés, fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la calidad del sueño y acelerar el proceso de recuperación después de enfermedades o lesiones.

A nivel emocional y mental: el Reiki puede ayudar a liberar emociones reprimidas, reducir la ansiedad y la depresión, aumentar la claridad mental y promover una sensación general de paz y serenidad.

En el aspecto espiritual, el Reiki puede fomentar la conexión con uno mismo, con los demás y con el universo, facilitando el crecimiento personal y el desarrollo espiritual.

El Reiki está dirigido a cualquier persona que busque mejorar su salud y bienestar en todos los niveles. No tiene restricciones de edad ni de condición física, y puede ser beneficioso para personas de todas las edades, desde niños hasta adultos mayores.